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El Gobierno Nacional reafirma la decisión de captar inversiones privadas en el sector de hidrocarburos a través de Decreto Ejecutivo

Imagen Referencial Infraestructura Petrolera-Refinería Esmeraldas

BOLETÍN DE PRENSA

Quito D.M., 02 de Diciembre de 2021

Con el objetivo de cumplir con los lineamientos planteados en la Política Hidrocarburífera del país, el Presidente de la República, Guillermo Lasso Mendoza, suscribió, el pasado 01 de diciembre, el Decreto Ejecutivo Nro. 279, el cual tiene como finalidad la derogatoria del Decreto Nro. 407, de 26 de agosto de 2005.

La decisión presidencial se enmarca estrictamente en el cumplimiento de uno de los pilares establecidos en el Decreto Ejecutivo Nro. 95, de 07 de julio de 2021, el cual promueve la inversión privada nacional o extranjera, para el fortalecimiento de la cadena de valor de los hidrocarburos y el desarrollo de nuevos proyectos. Incluir ley de hidrocarburos.

El Decreto Ejecutivo 407, prohibía la construcción e implementación de nueva infraestructura de almacenamiento, abastecimiento, envasado y distribución de derivados de hidrocarburos y gas licuado de petróleo (GLP), lo cual se contrapone con La Ley de Hidrocarburos, en su artículo  1-A, que determina: «En todas las actividades de hidrocarburos, prohíbanse prácticas o regulaciones que impidan o distorsionen la libre competencia, por parte del sector privado o público. Prohíbanse también prácticas o acciones que pretendan el desabastecimiento deliberado del mercado interno de hidrocarburos.

El Ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, Juan Carlos Bermeo Calderón, enfatizó que: “La derogatoria del Decreto Ejecutivo Nro. 407 es una decisión acertada por parte del presidente Guillermo Lasso. A través del nuevo Decreto Nro. 279 se alinean las acciones para lograr nuevas inversiones en el área petrolera y dinamizar el mercado, a través de una competencia justa entre operadoras privadas”.

El Gobierno del Encuentro enfoca sus decisiones en potenciar las actividades hidrocarburíferas a través de la inyección de recursos privados, los cuales son fundamentales para salvaguardar los intereses nacionales, proteger la economía ecuatoriana y generar empleo.